El Amor es una Feria de Juegos


Algunos sueñan con un Amor de Carrusel
la melodía en círculos los envuelve en intensidad,
Cada corcoveante deseo
se libera en el esbozo de una sonrisa
aferrados a doradas crines de libertad...

Otros prefieren la seducción de la música de la selva
energizar las venas hasta el desmayo,
Los tambores pulsan un compás acelerado
hierve la sangre sin rumbo
danza el Alma hasta el mareo
remolinan unos con otros
se pasean de boca en boca...

Un puñado ortodoxo vive giros continuos
su viaje épico al pico más alto,
todo por aquel encanto
de ver más allá del horizonte
es el mismo que les impide Ver
que no siempre se puede Estar
en la cúspide del mundo,
vuelta tras vuelta
el molinete se torna repetitivo
y el paisaje... no es tan profundo,
Vagando en una arandela vertical
hacinados al silencio de Diván...

En otro rincón
perdidos por un instante de shock
colgados como péndulos a la deriva
arriesgando Todo
sin apostar nada
jugando con una moneda de doble cara
buscando un milagro ausente
Sentir
algo más que el viento rozando una caricia...

Otros
solo aceleran al máximo
convirtiendo la noche en gritos,
Sujetados de las manos
la Adrenalina
el combustible que arde a través de los rieles
mimetizando una estrella fugaz
cortando el cielo en dos...

El Amor de Feria...
siempre guarda un lugar para mí
encerrado entre vallas
en un turbulento enjambre metálico
deslizándose en un caos de roces electrificados
choques y frenadas inesperadas,
Mi Amor de Feria no es más que mi brazo tatuado con el sello de la cara de un payaso sonriente y su lágrima eterna esperando en la cola del próximo Juego.